Hoy viajamos a principios de la década de los 70. En 1972, Polaroid lanzó al mercado una obra de arte, una pieza única, su SX-70. Esta cámara no tardó en convertirse en una revolución, un icono de la fotografía, una especie de promesa de historias instantáneas que capturarían el momento sin complicaciones. Casi de forma mágica. Fue algo más que una simple evolución de la Land Model 95, mucho más compleja de usar, era una fascinante máquina automática y colapsable, de bolsillo, capaz de capturar hasta 5 imágenes en 10 segundos. Otra maravilla de Edwin H. Land.
Antes de que la cámara se comercializara, el fotógrafo de la revista LIFE, Co Rentmeester, tuvo la oportunidad y el privilegio de ponerla a prueba. El resultado es este set de imágenes que, vistas con el paso de los años, conservan todo su esplendor y un innegable halo surreal que nos recuerda que esos momentos congelados sucedieron hace la friolera de 50 años. Y ahí siguen. Como si fueran retazos de una vida lejana, como si transitaran entre la realidad y la ficción. Como un susurro de lo que fue. De lo que sucedió.
Magia, sin duda.









© Todas las imágenes: Co Rentmeester/The LIFE Picture Collection/Shutterstock