Mi amigo y maestro Jose María Piera compartió hace poco este tweet conmigo:

A ⁦@XaviGasso⁩ creo que le encantará esto
https://t.co/4gf9EbazJp

— jose maría piera (@jmpiera) August 31, 2021

… y (¡pam!) a mi mente acudieron al instante los fabulosos ejercicios fotográficos de la artista eslovaca Andrea Koporova. Sí, Piera tenía razón, me encantó su propuesta. Esa perfección, esa sincronía, esa – déjame decirlo – obsesión por el detalle de Svarbova, me parecen fascinantes. Me capturan y absorven. Es algo parecido – volviendo a ella – a lo que me sucede con las fotografías de Koporova.

Supongo que querrás saber la razón de esa conexión mental, ¿verdad? Dejaré que la obra de Andrea hable por sí misma, aunque ya te avanzo que la estética de las fotografías de la serie In the Swimming Pool (del tweet) me hicieron viajar a dos colecciones en concreto de Koporova, tituladas Formation y Game. En ambas tendrás la sensación de estar mirando el mundo – su mundo – a través de un caleidoscopio por la intensa variedad de patrones geométricos y colores que las hacen inconfudibles. Sí, el espejo les confiere – en ocasiones – un toque algo inquietante, construyendo una curiosa sensación de soledad concurrida, pero todo forma parte del viaje que harás a través de su mirada.

Empiezo por Formation (por la referencia acuática, ya lo verás…):

Sigo con Game, tal vez por esa idea de sincronización (en este caso, evidentemente, construida de una forma muy hábil por la creatividad de Andrea):

Y para acabar, a modo de bonus track, este Gym que mantiene la esencia de ese juego. Fantástico, también.