Hoy nos vamos lejos. Muy lejos. A Teriberka (suena lejos de verdad, ¿no?). Y lo hacemos a través del objetivo inquieto y curioso de Viktor Balaguer, un must si quieres descubrir Rusia desde otro punto de vista. Este fotógrafo francés colecciona fabulosas series en las que cada imagen cobra vida de una forma inesperada. Fantástica. Ya te aviso que no será la última vez que lo verás aquí, pero sí he de decir que en esta ocasión viene perfecto (pensando en el otro lado de la ventana).
Y es que hace frío. Mucho frío. Vale que es aquí (depende de dónde estés tú puede que no tanto), pero – insisto- hace el suficiente frío como para que al salir a la calle sintamos nuestro aliento congelándose al otro lado de la mascarilla (modernidades pandémicas, ya sabes). Sin embargo esto no es nada, absolutamente nada, comparado con Teriberka, en el Circulo Polar Ártico ruso. Puro hielo. Sin duda.
Pero, también, y esa es la gracia, te llevo a un lugar mágico, fascinante, maravilloso, en el que todo parece sacado de un libro de ciencia ficción. En el que cada rincón esconde un secreto sepultado sobre centímetros de nieve. En el que si miras arriba te perderás en la Aurora Boreal (que era, precisamente, lo que Viktor buscaba).
Pura literatura. Pura narrativa. Visual. Wow.
Empezamos la ruta hacia Teriberka, aquí:



La llegada. El descubrimiento:




Un punto de encuentro:


El Lada (claro) , Andrey y el perro:



La belleza de la Aurora:

La mañana después:


Leviathan



En las calles de Teriberka:









Antes de marchar:



De vuelta a la carretera:

Una respuesta a “¿Tienes frío? Podría ser peor…”
[…] con Viktor Balaguer. Una de las cosas buenas de repetir artista con tan poco tiempo de diferencia es que no necesitas […]