«Hay una colonización del ser propio que refleja la fusión de identidades parciales por obra de la saturación social. Y está apareciendo un estado multifrénico en el que comienza a experimentarse el vértigo de una multiplicidad ilimitada”. Así describe Kenneth Gergen el concepto multifrenia, un término que conforme la tecnología va ganando terreno en nuestro día a día, conforme ese contacto social sigue desarrollándose de formas muy diversas, y cada vez recibimos más impactos simultáneamente en direcciones múltiples y conflictivas, va enriqueciendo su significado y presencia. Como si se hubiera tratado de una premonición a medio plazo que, hoy, se cumple de forma milimétrica (y casi alarmante).
Y ese es, precisamente, el punto de partida que ha elegido el artista japonés Teiji Hayama para darle forma a su obra. Sus cuadros funcionan como una fenomenal metáfora multifrénica, una mirada consciente a una realidad que casi caricaturiza este universo social sobreestimulado en el que vivimos. Todo a través de retratos de celebridades como Marilyn Monroe, Bruce Lee, Grace Kelly o Goldie Hawn, a los que viste con rasgos faciales tan exagerados como, sí, inquietantes. El glitch que usa consigue ese efecto. Y se filtra en tu mirada hasta convertirla en parte de su juego.
Todo ello en una combinación absolutamente fascinante. ¿Juegas?

















