Creo que esta ha sido una de las ocasiones en las que más me ha costado escoger una imagen destacada, y sé que dentro de unos minutos vas a sentir exactamente la misma sensación de fascinación cuando recorras el mundo a través de los ojos de Michelle von Kalbe. Y es que esta emprendedora y (obvio) fotógrafa alemana de (jo) sólo 23 años, un buen día decidió dejarlo todo, poner su talento y su pasión a trabajar juntos en los productivos terrenos digitales, y dejar que el destino hiciese el resto.
Y ese resto ha sido viajar por todo el mundo creando arte y fotografiando, sea para ella o para las empresas con las que colabora. Todo ello envuelto en formato «sueño cumplido» que no deja de ser algo así como el fruto de su pasión y de sus (por supuesto) habilidades al servicio de una visión que se va haciendo realidad día a día.
Pues nada, que nos sirva de inspiración (y para desconectar un poco rincón a rincón).























































































































