Resulta evidente que este 2020 ha cambiado nuestra propia percepción del mundo. Hemos descubierto nuevas formas de relacionarnos con nuestro entorno, sea el sofá de casa, o sea esa ruta improvisada por la colina-que-queda-a-las-afueras que, durante meses, fue (tal vez, todavía lo es) el único lugar que nos permitió respirar aire puro y desconectar (desconectar, ojo). Hoy muchas cosas son diferentes. Incluso nosotros nos hemos transformado por pura necesidad de supervivencia, o por puro instinto de convivencia. A partir de esta relidad (innegable y diría que incuestionable), los canadienses Siaya han lanzando una nueva campaña de marketing para posicionarse en un territorio (outdoor) el que, si no eres uno de los grandes players, necesitas diferenciarte.
Para eso, esta compañía de indumentaria deportiva ha contado con la ayuda de Havas Montreal en la construcción de una campaña que nos recuerda que no estamos destinados a pasar demasiado tiempo encerrados entre cuatro paredes y que, de alguna forma, lo nuestro es salir y descubrir, explorar, saltar, vivir. Bajo el paraguas del eslogan “Weird things happen when you spend too much time indoors” han trabajado diferentes ejecuciones que, inspiradas en el surrealismo, se convierten en una metáfora de aquello en lo que nos convertimos durante semanas y semanas y nos recuerda cuánto bien nos puede hacer entrar en contacto, de nuevo, con la naturaleza. Al final, su público objetivo es ese, y pocas pasiones tiran más que pisar un camino por explorar todavía.
Probablemente, más allá de la creatividad, que me parece fascinante (no es ninguna sorpresa, lo sé: arte), lo que más me atrae de esta campaña es la valentía que han demostrado buscando esa diferenciación. Cuando piensas en las estrategias comunicativas de cualquiera de sus competidores, lo primero que te viene a la mente son montañas, tiendas de campañas, muchos árboles, bucólicas praderas, ríos – profundos y cristalinos ríos – aire puro, gorros, guantes, sonrisas, y lugares vírgenes, ¿verdad?. Pero Siaya ha ido al otro extremo de lo emocional: a lo que nos puede suceder si dejamos que esos interiores se apoderen de nosotros. Al final, ¿quién quiere convertirse en una butaca más de su salón?
¿Arriesgado? Sí. Sin duda. Pero en ese sector, si no lo eres (o no tienes a un Kilian Jornet que prácticamente comunique solo), a veces necesitas ir un paso más allá. A veces…
















Una respuesta a “Cuando el surrealismo encontró a la publicidad…”
[…] a la usual. Lo has podido ver estas últimas semanas aquí, en Phusions, en territorios como la publicidad, la fotografía o – también – el collage. Todos ellos suponen (y te regalan) una […]